Los impuestos y tasas generaron 3.800 millones de euros en las arcas municipales el año pasado. El IMI es el impuesto más relevante, pero la recaudación del IMT (impuesto sobre la adquisición de bienes inmuebles) se disparó un 38% en 2021, reflejando la reanudación de las transacciones inmobiliarias tras un año atípico debido a la pandemia de Covid-19. El Anuario Financiero de los Municipios Portugueses, revela que el IMT cobrado por Lisboa representa el 19,6% de la recaudación total de este impuesto a nivel nacional.
Según la OCE, el total de los impuestos y tasas cobrados por los municipios aumentó un 10,44% con respecto a 2020. Los ingresos fiscales tienen una gran importancia en el total de los ingresos municipales, ya que contribuyen, de media, al 38,4% de los mismos, aunque este peso varía en función del tamaño del municipio. "En 2021, en los municipios de pequeño tamaño esta media se situó en el 16,3% de los ingresos totales, en los medianos ascendió al 36,2% y en los grandes al 54,5%", detalla el anuario.
Los impuestos directos aportaron el 89,7% de los ingresos fiscales (3.410 millones de euros), los indirectos sólo pesaron el 1% (36,2 millones de euros) y las tasas, multas y otras sanciones el 9,4% (356 millones).
Entre los impuestos directos, destaca el Impuesto Municipal sobre Bienes Inmuebles (IMI), que generó una recaudación de 1.480 millones de euros, la más importante en términos fiscales, pero que todavía supone una reducción del 1,1% respecto al año anterior, teniendo en cuenta que 85 municipios optaron por rebajar el tipo de este impuesto que grava el valor del activo imponible (VPT) de los inmuebles rústicos y urbanos situados en el territorio. Sin embargo, hubo 13 municipios que, a pesar de haber reducido el tipo del IMI, tuvieron un incremento en la cantidad recaudada. Los casos más significativos fueron los de Grândola (+5,4% de ingresos), Alcanena (+2,6%) y Penela (2,5%).