Según los datos divulgados por UBS en el Global Wealth Report 2023, cada adulto portugués poseía, en términos medios, un patrimonio de 66.015 euros al final del año pasado, casi el doble que en 2012 (34.725 euros) y más 2,89% que en 2021 - lo que también se traduce en una fortuna global de 149 mil euros en 2022 (76% más que en 2012). Sostener el crecimiento de los activos portugueses en el último año, fueron los activos inmobiliarios que, según los analistas de UBS, similar a lo que ocurrió en el resto del mundo, "se mantuvo resistente, a pesar del rápido aumento de las tasas de interés".

Además, los analistas de UBS revelan que, a finales del año pasado, el número de portugueses propietarios de una fortuna de más de 1 millón de euros superaba los 166.000, lo que equivale a cerca del 2% de la población adulta. Se trata de una cifra un 23% superior al número de millonarios registrados a finales de 2020, es decir, 31.000 nuevas fortunas; y 8,7 mil millonarios más que en 2021.

Ultra ricos

Y dentro del grupo de millonarios, el Global Wealth Report 2023 identifica a 108 portugueses con fortunas ultra altas (más de 50 millones de dólares), con 9 con fortunas superiores a los 500 millones de dólares (unos 470 millones de euros).

A pesar de este crecimiento, Portugal sigue representando muy poco en términos de riqueza mundial: según datos de UBS, la riqueza generada en Portugal equivale apenas al 0,3% de la riqueza mundial. Según los datos del Global Wealth Report 2023, la mayoría de los portugueses (el 43%) tiene un patrimonio de entre 10.000 y 100.000 dólares (unos 9.400 y 94.000 euros).

Los analistas de UBS también revelan que los portugueses también están menos endeudados que hace diez años. Si en 2012, la deuda por cada adulto portugués era de casi 21 mil euros, a finales del año pasado la carga de la deuda se redujo en un 6,8% a 19,5 mil euros.

El impacto de esta reducción es aún más relevante cuando se observa que la relación entre deuda y riqueza también se redujo significativamente: si en 2012 la deuda representaba el 60,3% de la riqueza mediada por cada adulto portugués, al final del año pasado pesaba la mitad, cerca del 29,6%.