"La tendencia, sin duda, es intentar imitar el fútbol masculino en Arabia [Saudí]. Con la llegada de Cristiano Ronaldo, Benzema, entre otros grandes talentos del fútbol masculino que vienen a desarrollarse y a hacerse un nombre aquí en Arabia", admitió recientemente el seleccionador en una entrevista.

Luís Andrade, que vive su tercera etapa con un equipo femenino en Dammam, tras Benfica y Flamengo, está convencido de que el fútbol femenino en Arabia Saudí, que sólo es la segunda edición del campeonato, evolucionará.

"Crecer, evolucionar y dar a este campeonato un nombre muy fuerte, con jugadoras con un gran perfil, que han jugado en campeonatos europeos, equipos muy fuertes en Europa, o el propio mundial", añadió.

En este contexto, los ocho clubes que compiten en la liga femenina pueden fichar hasta siete jugadoras extranjeras, en un sistema en el que cuatro pueden jugar al principio, para aportar calidad, pero también para transmitir conocimientos.

"Hemos conseguido que estas jugadoras se desarrollen, que ayuden a nuestro equipo a jugar bien al fútbol y que ayuden de nuevo a las jugadoras árabes. Y eso es lo que están haciendo. Comprometidos, concentrados, por supuesto, sólo pueden jugar cuatro, ahí estará mi elección", explicó.

El ex jugador, que ha tenido que construir un proyecto desde cero desde su llegada al Al-Qadisiyah en septiembre, cuenta en su plantilla con "dos colombianos, un brasileño, tres estadounidenses y un jugador de Costa de Marfil".

"ElAl-Qadisiyah aún no tenía jugadores, fue el último equipo en hacer la pretemporada. Es decir, tuve tres semanas para preparar la pretemporada", explicó el técnico, haciendo hincapié en la necesidad de trabajar las posiciones de los jugadores.

El trabajo de base se basó en tres aspectos: fichar a jugadores extranjeros, utilizar a los menos habituales de otros equipos -este es el primer año del Al-Qadisiyah- y probar a nuevos jugadores árabes.

"Al-Qadisiyah se incorporó este año. Así que empezamos de cero. En otras palabras, tuvimos que hacer 'pruebas' para invitar a las chicas a venir a entrenar con nosotros. Y luego reunimos a las mejores jugadoras para poder hacer un grupo con el que trabajar", explicó.

Dado el rendimiento del equipo, con cuatro empates en cuatro partidos y una de las mejores defensas (dos goles encajados), esta logística ha supuesto una gran satisfacción para Luís Andrade.

"Con un mes y medio de trabajo de pretemporada y entrenamientos antes de los partidos, estamos haciendo un buen trabajo, y queremos continuar. No es una tarea fácil, pero en cualquier caso, es un reto muy ilusionante", afirmó.

desafío", afirmó.

En el grupo, la comunicación es en inglés, con traducción al árabe, cuando es necesario, en una plantilla que mezcla profesionales con futbolistas a tiempo parcial con trabajos distintos al fútbol.

"Los jugadores extranjeros deben ser profesionales porque para vivir aquí en Arabia tienen que tener un contrato profesional. También tengo jugadores árabes que trabajan. Trabajan y juegan al fútbol. Trabajan por la mañana porque sólo podemos entrenar por la tarde debido al fuerte calor", reveló.

En la liga femenina, Andrade es uno de los entrenadores masculinos, en una apuesta dividida entre hombres y mujeres, cambiando de nuevo el paradigma más conservador de la sociedad: "Es mitad y mitad. También tenemos una segunda liga, formada por entrenadores masculinos y femeninos", explicó.