ElAyuntamiento de Lisboa decidió esta semana, por unanimidad, formalizar el no aumento del valor de los alquileres de las viviendas municipales durante este año, una medida que tiene un impacto presupuestario previsto de 1,9 millones de euros.
"Acabamos formalizando este momento porque nos parece importante afirmarlo, e incluso este año, aunque parece que el contexto es favorable, el contexto está mejorando, el pico inflacionario se está estabilizando, todavía estamos viviendo la secuencia de una inflación enorme y, por lo tanto, las familias siguen pasando por esta dificultad", afirmó la concejala de Vivienda, Filipa Roseta (PSD).
En la sesión pública del consejo, la concejala recordó que el municipio implementó la medida en 2023, como parte de la lucha contra la inflación, que tuvo un impacto presupuestario de 719 mil euros.
Para este año, la medida tiene un impacto previsto en el presupuesto municipal de 1,9 millones de euros, indicó Filipa Roseta, recordando que para este año el límite máximo de actualización del valor de los alquileres se fijó en el 6%.
Según la concejala, el ayuntamiento sigue comprobando automáticamente la renta familiar cada tres años, pero no ha aumentado el valor del alquiler. Aunque no aumente, el ayuntamiento actualiza el valor de los alquileres en caso de reducción de los ingresos familiares.
Preguntada por el concejal del PCP Gonçalo Francisco sobre si la medida se aplica también a los espacios no residenciales del municipio, Filipa Roseta confirmó que sí, y añadió que se aplica al universo de 23 mil contratos de alquiler de bienes municipales, incluido el alquiler asequible, en los que la renta familiar media es de 900 euros/mes.
"Para estas familias, incluso 10 euros, incluso cinco euros, marcan la diferencia", dijo la concejala de Vivienda.
El concejal de Cidadãos Por Lisboa (elegido por la coalición PS/Livre) Rui Franco cuestionó por qué la propuesta se presentó a mediados de año, considerando que "es muy extraño que sólo llegue ahora" y acusando a la dirección del PSD/CDS-PP de "mala gestión".
Filipa Roseta justificó el retraso en la presentación de la propuesta por enmarcarla dentro del departamento de Finanzas.
En cuanto a la inversión del Ejecutivo en vivienda, la concejala del PS Inês Drummond acusó a la dirección del PSD/CDS-PP, que gobierna la ciudad desde hace tres años, de no haber construido aún "ninguna casa nueva", lamentando "el estado anémico en que ha tratado el problema de la vivienda", "arruinándose todo el tiempo", y en el que "suspendió más proyectos de vivienda que los que lanzó".
En respuesta, Filipa Roseta aseguró que cuando el PSD/CDS-PP tomó posesión, en octubre de 2021, el Ayuntamiento tenía en construcción un total de 704 viviendas de las 6.000 prometidas por el anterior presidente del Ejecutivo municipal, Fernando Medina (PS), concretamente 170 en los barrios municipales, 256 en Entrecampos y 278 en rehabilitación.
987 viviendas en construcción
En estos momentos, el Ayuntamiento tiene 987 viviendas en construcción, de las que 747 son de obra nueva y 240 están en rehabilitación, y cuenta con 1.750 en proyecto, según el concejal de Vivienda.
"El calendario de construcción se está duplicando, así que para la ciudad es una buena noticia porque se construirán muchas más casas", añadió.
La socialista Inês Drummond también criticó la posición del PSD/CDS-PP sobre el alojamiento local , es decir, la revocación de la contribución extraordinaria aprobada el viernes en el Parlamento, y acusó al alcalde de Lisboa, Carlos Moedas (PSD), de estar "ciego y sordo" respecto a la urgencia de retirar casas del alojamiento local y devolverlas al uso de vivienda.
"Si hay un alcalde que no aumentó el alojamiento local en Lisboa, fui yo", respondió Carlos Moedas, indicando que en los ejecutivos del PS, el alojamiento local pasó de 500 a 18.000 y "hubo una política socialista de aumento del alojamiento local".
El edil del PSD también dijo que cuando él llegó al cargo, el alojamiento local ya estaba suspendido en determinadas zonas de la ciudad, medida que sigue vigente, y se creó un reglamento.
Este documento, añadió, aún no ha sido aprobado por decisión de la oposición, porque quería evaluar primero la Carta Municipal de la Vivienda.