El verano está en plena efervescencia, y puede que esté pensando en recibir invitados en el exterior o simplemente en organizar una comida informal para la familia. Jardín o balcón: convierta cualquiera de las dos opciones en una ocasión memorable.


Asientos de verano

Seleccionar las mesas y sillas de exterior adecuadas no sólo implica consideraciones prácticas, sino un equilibrio entre funcionalidad y diseño, y su espacio exterior tiene que complementar el ambiente de otras partes de su jardín o balcón. Con una cuidadosa consideración y un poco de estilo a la hora de elegir los muebles de exterior, lo que elijas puede crear un espacio acogedor y confortable.

Si tu presupuesto es ajustado, puedes utilizar cojines nuevos y brillantes para dar un nuevo aspecto a los muebles de exterior que ya tienes, pero si vas a comprar una mesa y unas sillas nuevas, elige con cuidado para minimizar el mantenimiento. Algo endeble y barato puede ser un falso ahorro a largo plazo, ya que podría no durar hasta la próxima temporada. Piensa en sillas plegables si el almacenamiento es un problema, y una mesa extensible aumentará el espacio para invitados. El tamaño puede ser importante: asegúrate de que hay espacio suficiente para que la mesa y todos los que la rodean puedan sentarse cómodamente y deja espacio suficiente para sacar las sillas sin rozar la pared o la barandilla, con espacio suficiente para que los invitados caminen alrededor de la mesa sin tropezar con los muebles. El metal plastificado y la madera durarán bien, pero la madera necesitará ser engrasada de vez en cuando tras los estragos de un posible invierno húmedo y el calor del verano.


Ambienta la mesa con una buena decoración

Las reuniones al aire libre suelen ser más relajadas que las que se celebran en el interior, y las fuentes y los platos para servir dan un toque especial a la mesa, ayudando a reunir a la gente en torno a una comida compartida y una buena conversación.

Las mesas con salvamanteles quedan bien en un entorno más formal, y los de ratán son siempre los preferidos, aunque los de corcho o más sólidos no se volarán. Para fregar lo menos posible, puede usar platos desechables de colores, pero utilice vajillas atractivas: unos bonitos platos o fuentes tradicionales portugueses harán que la comida tenga tan buen aspecto como sabor, o utilice grandes cuencos de madera hechos a mano y decadentes jarras de terracota como centro de mesa o para servir la comida y la bebida.Las servilletas pueden ir a juego o en contraste con los manteles individuales o los platos, y los servilleteros individuales o un soporte central con peso pueden evitar que salgan volando. Mi servilletero es una taza de café portuguesa gigante que perdió el asa en algún momento, y es un soporte estupendo para servilletas, cubiertos o ambas cosas.

No a todo el mundo le gustan los manteles, pero en mi opinión no hay nada más bonito, sobre todo si la mesa de debajo deja mucho que desear. Se pueden utilizar pinzas para sujetar los manteles. Yo encontré unas muy bonitas en Internet, pero si tienes arte, puedes hacer las tuyas propias y colgarlas de unas pinzas metálicas básicas.

Créditos: envato elements;

Si quieres impresionar a tus invitados, crea un interesante centro de mesa. Sea creativo y cree el suyo propio, simplemente colocando flores de cualquier tipo en un jarrón o exponga una gama de velas de diferentes tamaños, especialmente de citronela, ya que le ayudarán a mantener alejados a los mosquitos. Para una mesa larga, puedes utilizar una guirnalda de verano de cuerpo entero y farolillos decorativos para potenciar el ambiente, y los farolillos de papel de colores que se pueden plegar y recoger después pueden añadir algo especial.


¿Té por la tarde?

Un café por la mañana o un té por la tarde puede ser algo diferente: una gran tetera (o café), tazas, platillos y platos de té, pequeños sándwiches y deliciosos dulces portugueses en un puesto de tartas a la antigua me parece bien.

Arregla el espacio de antemano: a veces basta con poner flores en macetas o cestas colgantes para dar un toque de color veraniego, y esconde las herramientas, cubos de limpieza y fregonas que tengas por ahí. No te olvides de dar sombra: una mesa bajo un árbol o una sombrilla protegerá a tus invitados del sol.

Y no lo olvides: en un rincón, una bolsa para que los invitados recojan ellos mismos los productos desechables.


Author

Marilyn writes regularly for The Portugal News, and has lived in the Algarve for some years. A dog-lover, she has lived in Ireland, UK, Bermuda and the Isle of Man. 

Marilyn Sheridan