¿Cuántos de ustedes han tenido un accidente en casa? Estoy seguro de que casi todos, ya sea un dedo rebanado que se interpuso en el camino de las zanahorias, a un tropiezo de los escalones de su escalera - calcular mal la distancia del último paso es un común que debo pensar. Los accidentes domésticos pueden ocurrir en cualquier sitio, y no hace falta estar en el tejado arreglando tejas o cayéndose encima del gato (aunque es evidente que estas situaciones ocurren). Se calcula que el 78% de los ingresos en urgencias se deben a accidentes domésticos, de los cuales el 23% son caídas, y un gran porcentaje de ellas se producen, precisamente, al ir al baño. Levantarse o bajarse de un inodoro que no tiene la altura suficiente es una de las principales causas de caídas en el baño, y según los investigadores, las lesiones en el baño aumentan y alcanzan su punto máximo con la edad.


Las caídas son la principal causa de lesiones domésticas.

Los resbalones, los tropezones y las caídas son accidentes que pueden ocurrir en cualquier sitio: suelos mojados, alfombras sueltas, habitaciones desordenadas... ¿Cuántos padres se han parado sobre piezas de Lego por accidente? Mi marido incluso se paró una vez sobre un tapón volcado y se hizo un agujero en la planta del pie.

Hay formas sencillas de reducir estos riesgos. Utilizar alfombrillas antideslizantes en bañeras, baños y cocinas puede ser un buen comienzo, seguido de limpiar rápidamente los derrames que puedan provocar un resbalón. No pases cables por las habitaciones, y mantener los pasillos y escaleras despejados reduce también la probabilidad de tropezar con cosas.


Mantente alejado de superficies calientes

Las placas de cocina, los hornos y el agua caliente pueden causar quemaduras o escaldaduras a niños y adultos. Hay que tener cuidado al cocinar o servir la comida. Hace poco, sin darme cuenta, saqué un plato caliente del horno sin usar un guante de cocina y sufrí las consecuencias: no sólo se me ampollaron los dedos, sino que el plato se cayó, depositando comida por todas partes y un amasijo de cristales rotos.


Envenenamiento

La intoxicación es algo que probablemente sólo consideres un peligro si tienes niños pequeños cerca, pero puede ocurrirle a cualquiera. El hogar medio está plagado de sustancias venenosas, como productos de limpieza, medicamentos o insecticidas. Los alimentos caducados o mal preparados pueden ser venenosos, y algunas plantas de interior pueden ser tóxicas si se ingieren accidentalmente. Guarde siempre los objetos venenosos de forma segura, idealmente con cerraduras a prueba de niños si hay niños en casa.


Distensiones y esguinces

Las torceduras al levantar objetos pesados y alcanzar estantes altos pueden provocar lesiones musculares, por lo que conviene utilizar técnicas de levantamiento adecuadas y utilizar taburetes o escaleras para alcanzar lugares altos de forma segura. Guarde las cosas que no utilice a menudo en la parte superior del armario, y las que utilice con frecuencia más abajo, donde sea más fácil alcanzarlas.

Créditos: envato elements;

Cortes

Una vez estuve a punto de cortarme un dedo sujetando estúpidamente un tronco con una mano y blandiendo un hacha con la otra (tuve que ir a urgencias y me dieron 4 puntos de sutura), y todos nos hemos hecho algún corte accidental con un cuchillo de cocina o unas tijeras. El consejo de seguridad es tan sencillo como importante: ten siempre cuidado al utilizar objetos afilados. Ten cuidado con los riesgos menos obvios, como una tapa de lata abierta.


Asfixia

Los riesgos de asfixia son especialmente peligrosos en los hogares con niños pequeños, ya que cualquier objeto pequeño puede convertirse en un riesgo de asfixia: no sólo los alimentos, sino también los juguetes, monedas, botones y clips, etc. Los adultos también pueden correr el riesgo de asfixia al ingerir alimentos.

La lista de peligros continúa: descargas eléctricas, mordeduras de animales, lesiones en actividades recreativas (lleva ese casco en la bici aunque no te siente bien). Los ahogamientos o casi ahogamientos pueden producirse en bañeras, estanques de jardín e incluso retretes, o en piscinas sin vallar o sin vigilancia: los bebés o los niños pequeños pueden ahogarse en tan solo 5 cm de agua. Si conoce los peligros de su hogar, podrá tomar las precauciones necesarias para protegerse y proteger a su familia.

Todos cometemos errores, unos peores que otros, así que eche un vistazo a su alrededor y vea si puede reducir las posibilidades.


Author

Marilyn writes regularly for The Portugal News, and has lived in the Algarve for some years. A dog-lover, she has lived in Ireland, UK, Bermuda and the Isle of Man. 

Marilyn Sheridan