En una pregunta dirigida a la ministra de Medio Ambiente y Energía, Maria da Graça Carvalho, la portavoz y diputada única del partido Pueblo-Animales-Naturaleza(PAN) escribió que "uno de los lugares preferidos para visitar" en este parque nacional es la cascada de Barja, conocida como Cascada de Tahití.

El partido afirma que en el lugar se han producido algunos accidentes debido a las "malas condiciones de seguridad que ofrece el paisaje y el sendero natural", algunos de los cuales han provocado "pérdidas humanas".

En el texto, Inês Sousa Real escribe que "con el pretexto de aumentar la seguridad en el acceso a la cascada de Tahití, la autoridad local de Terras de Bouro pretende construir varios puntos de acceso a la misma, vallas, un aparcamiento y un gran mirador sobre la cascada".

"Sin descuidar la importancia de garantizar la seguridad y la protección de los visitantes de esta zona, una mirada atenta a las imágenes difundidas de este proyecto demuestra que no sólo no respeta el paisaje natural del lugar, sino que va mucho más allá de la promesa de seguridad", critica.

El portavoz del PAN afirma que "aunque esta obra haya sido aprobada por el Instituto de Conservación de la Naturaleza y de los Bosques(ICNF) y por la Asociación Portuguesa de Medio Ambiente(APA), el dictamen en cuestión recibió una aprobación condicional favorable", destacando que se desconocen "las medidas de mitigación que deberán aplicarse".

El partido pide respeto por la naturaleza y la biodiversidad del lugar y "más transparencia" en relación con el proyecto de la autoridad local.

El alcalde de Terras de Bouro justifica la obra, ya adjudicada por 205 mil euros, con la necesidad de evitar los accidentes que ocurren anualmente en la Cascada de Barja, conocida como la Cascada de Tahití, donde la autoridad local quiere prohibir el baño.