Según un informe de ECO, el Gobierno propondrá un aumento del Salario Mínimo Mensual Garantizado (SMGM) a 860 euros el año próximo. El aumento del salario mínimo en torno al 4,9% -por encima de la previsión de crecimiento económico nominal del Gobierno, en torno al 4,5%- se discutirá con las confederaciones patronales y los sindicatos en la reunión de la Concertación Social prevista para este miércoles, 11 de septiembre.

El acuerdo de rentas firmado por el Gobierno de António Costa con las confederaciones patronales y UGT en 2022 establecía que el salario mínimo a aplicar en 2025 sería de 855 euros. Sin embargo, el actual Gobierno considera que hay margen para ir más allá, por lo que propone una subida de 40 euros (de los 820 euros actuales a 860 euros), en lugar del incremento ya pactado de 35 euros.

De momento, entre los representantes de los trabajadores, la CGTP ya ha dejado claro que exige que el salario mínimo alcance los 1.000 euros el año que viene, para hacer frente al "fuerte aumento del coste de la vida", mientras que la UGT indicó que hay margen para llegar a los 890 euros, en una entrevista concedida al Jornal de Negócios y Antena 1.

La promesa de un salario mínimo de mil euros fue realizada por Luís Montenegro durante la campaña electoral y posteriormente se incluiría en el programa del propio Gobierno, como una de las medidas encaminadas a crear un país que "valore el trabajo". También es una continuación de los sucesivos aumentos que se han realizado en los últimos años. Tras varios años congelado, el Salario Mínimo Mensual Garantizado subió a 505 euros en octubre de 2015 y, desde entonces, no ha dejado de crecer (ni siquiera durante los años de la pandemia).

Por ejemplo, en 2020, pasó de 600 euros a 635 euros. En 2021, de 635 euros a 705 euros. Y en 2022, de 705 euros a 760 euros. En cuanto a 2023, estaba previsto un aumento de 50 euros a 810 euros, pero el Gobierno de António Costa decidió ir más allá e introdujo el "mayor aumento del salario mínimo de la historia": de 60 euros a los 820 euros actuales, es decir, un incremento del 7,9%. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que los trabajadores que perciben el salario mínimo tienen que pagar el 11% del Impuesto Social Único (TSU), es decir, en 2024, esto corresponde a un salario neto de 729,80 euros al mes.

A pesar de estos sucesivos aumentos, un reciente análisis de la Fundación Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y de Trabajo ha demostrado que quienes perciben el salario mínimo garantizado siguen teniendo serias dificultades para pagar las facturas a final de mes. Casi tres de cada diez de estos portugueses admiten que es todo un reto cuadrar el presupuesto familiar, una situación que se ha visto agravada por la elevada inflación de los últimos años.

Peor aún, Portugal figura entre los países europeos en los que la situación de estos trabajadores ha empeorado debido a la elevada inflación, junto con Bulgaria, España y los Países Bajos, por ejemplo.