En una respuesta enviada a Lusa, el Ministerio del Interior (MAI) señala que la nueva Unidad Nacional de Extranjería y Fronteras, prevista en el proyecto de ley de control de fronteras que debe aprobar la Asamblea de la República, se integrará en la actual Unidad Orgánica de Seguridad Aeroportuaria y Control de Fronteras, creada en el PSP al suprimirse el SEF el 29 de octubre del año pasado, y encargada del control de entrada y salida de personas del país por vía aérea y de la seguridad en los aeropuertos.
El ministerio que dirige Margarida Blasco también indica que "aún es prematuro avanzar" el número de miembros que compondrán esta nueva unidad ya que el PSP está "evaluando la dimensión de los procesos en materia de retorno e inspección, así como el impacto del nuevo sistema electrónico europeo de fronteras (SEF) en las operaciones fronterizas".
Según el MAI, los policías que formarán parte de esta unidad "ya están recibiendo formación específica y continuarán haciéndolo" y, además de asistir al curso de fronteras, también tendrán acceso a "formación especializada en varias áreas específicas como el retorno, el fraude documental, el análisis de riesgos, la inspección y las escoltas".
"La PSP prevé contratar a 600 policías el próximo año y este número aumentará en los años siguientes", añade el MAI, señalando que se modificará la Ley Orgánica de la PSP para incluir esta nueva unidad.
Control de fronteras
El ministerio precisa que la Unidad Nacional de Extranjería y Fronteras asumirá "las competencias en materia de control de fronteras aéreas, inspección y vigilancia de la estancia y actividad de los extranjeros en territorio nacional, decisión y ejecución de las acciones de retorno, gestión de los espacios de instalación temporal y similares, así como la seguridad aeroportuaria y fronteriza".
El MAI rechaza la idea de crear "un mini SEF dentro del PSP", al considerar que esta nueva unidad forma parte del plan migratorio del Gobierno y pretende "únicamente reforzar las competencias del PSP en esta materia".
"Con la creación de esta nueva unidad, el Gobierno pretende implementar una visión humanista y, simultáneamente, garantizar fronteras seguras y mecanismos ágiles de gestión integrada de fronteras, de acuerdo con el modelo europeo, asegurando así un sistema coherente de inmigración regulada, humana y con un control eficaz", señala también el MAI.
Según la proposición de ley del Gobierno, aprobada en Consejo de Ministros, la Unidad Nacional de Extranjería y Fronteras incluye las áreas de gestión de fronteras aéreas, seguridad aeroportuaria, retorno e instalación temporal, control y seguimiento de la estancia y actividad de los ciudadanos extranjeros en territorio nacional, en el ámbito competencial de la PSP, que son los núcleos urbanos.
Según la propuesta de ley, la PSP también controlará la estancia de ciudadanos extranjeros en el país en las zonas bajo su responsabilidad.
La discusión en la Asamblea de la República de esta propuesta de ley, que también modifica el régimen de retorno y regula el nuevo sistema de entrada y salida de ciudadanos fuera del espacio Schengen, está prevista para el 11 de octubre.