Luís Montenegro explicó que, en relación con el actual sistema de pensiones, "es propósito de este Gobierno estudiar el sistema en esta legislatura y posiblemente proponer cambios para otra legislatura en relación con su sostenibilidad".
Montenegro, ante las acusaciones de Raimundo, dijo que la acusación de que el Gobierno quiere cambiar las prejubilaciones no es seria y no tiene fundamento, recordando que esa no fue la intención "en ningún momento".
El presidente del Gobierno también aseguró que este cambio, si se produce, se hará después de unas nuevas elecciones legislativas y después de que el Gobierno comunique esta intención al país y vea renovada su legitimidad en las urnas.
"Si tenemos alguna idea que cambiar, la someteremos a la aprobación del pueblo. No lo hacemos a espaldas del pueblo, señor. Su Señoría está molesto porque el Gobierno no va a hacer nada en esta legislatura", dijo Montenegro en dirección al líder socialista, Pedro Nuno Santos, que protestaba durante la respuesta del Primer Ministro.
Aunque estaba respondiendo a Paulo Raimundo, el líder del Gobierno dedicó parte de su tiempo de respuesta a dirigirse a la bancada socialista, afirmando que fue el PS el que dejó a sus sucesores el Libro Verde sobre la Sostenibilidad de la Seguridad Social, que defiende "exactamente lo que el PS acusa [al Gobierno] de querer" hacer.
Montenegro dijo también que el Gobierno realizará ahora un "análisis en profundidad", a través de un grupo de trabajo, del estudio sobre la sostenibilidad de la Seguridad Social que dejó el anterior Gobierno y añadió que, si es necesario tomar alguna medida para dar solidez al sistema de Seguridad Social, el Gobierno tendrá "la valentía de decírselo directamente al país y preguntarle qué respuesta va a dar".
Raimundo había cuestionado al presidente del Gobierno, como ya hizo en el último debate quincenal, cuáles eran las intenciones del Ejecutivo, especialmente en lo que se refiere al acceso a la jubilación anticipada, y acusó al Ejecutivo de lanzar un "ataque a los derechos de los trabajadores", a la Seguridad Social y a los nuevos cambios en la legislación laboral.
"[Los miembros del] Gobierno quieren más horas y quieren más tiempo de trabajo, quieren aún más precariedad y quieren que los jóvenes trabajen hasta el final, hasta los últimos días de su vida", dijo.
El ministro de Trabajo ya ha asegurado que el Gobierno no tocará "ningún derecho adquirido" en materia de jubilaciones, rechazando estar de acuerdo con la limitación de las prejubilaciones, y descartó adelantar futuras medidas.
Por su parte, en declaraciones a CNN Portugal, el ministro de Hacienda aseguró el pasado jueves que el Gobierno no hará "ningún cambio estructural" en la Seguridad Social en esta legislatura.