Es "cada vez más común" que los restaurantes ofrezcan dos opciones de pago de la cuenta, una que incluye el valor de la comida y otra que añade un porcentaje de propina o gratificación. Esto según DECO PROTeste, destacando que "las propinas de servicio no son obligatorias en Portugal".

Esto significa que la decisión de dejar o no propina corresponde siempre al cliente: "Es su decisión si le presentan una cuenta con dos importes".

"La Asociación Portuguesa de Hoteles, Restaurantes y Similares(AHRESP) afirma incluso que "no se considera una buena práctica que el establecimiento sugiera una propina incluyéndola en el recibo de caja o en la lista de precios". El consumidor tiene esta opción si está satisfecho con la calidad de la comida y el servicio. En este caso, puede pagar en efectivo o a través del cajero automático", explica la organización de protección de los consumidores.

¿Aparece en la factura?

No, la "referencia a la propina no obliga al consumidor a pagarla". Por ello, "si paga con tarjeta bancaria, compruebe el importe introducido en el dispositivo antes de pagar, para confirmar si la cantidad incluye o no la propina".

"Si el establecimiento insiste en pagar la propina, el cliente siempre puede presentar una reclamación. En este caso, es mejor optar por el libro de reclamaciones electrónico. En casos extremos, puede ser necesario incluso recurrir a las autoridades", explica la organización.

La propina no es obligatoria en Portugal, pero "si un restaurante determina una cantidad de propina en su lista de precios, el cliente no tiene más remedio que pagarla".

"Los restaurantes que opten por fijar un determinado importe por el servicio prestado, que equivale a una propina, deben indicarlo en la lista de precios, exponiéndolo en un lugar visible. El cliente tiene derecho a ser informado con antelación y claridad sobre lo que tendrá que pagar", explica DECO PROTeste.

"Es importante distinguir si la propina está incluida en el precio, en cuyo caso el consumidor debe pagar por este servicio, o si esta cantidad no está incluida (como ocurre en la mayoría de los restaurantes), en cuyo caso no hay cantidades obligatorias".

La organización también explica que la "obligación de incluir las propinas en la factura es una forma de controlar su percepción y permitir su retención en origen".

"Para garantizar su tributación, las propinas deben quedar debidamente documentadas en la factura, correspondiendo al empresario determinar las cantidades percibidas en concepto de gratificación y distribuirlas entre los respectivos trabajadores. Este procedimiento debe permitir la identificación, cuantificación y control de los importes en cuestión", señala.

También es importante destacar que "las propinas están sujetas al SII por ser consideradas rentas del trabajo dependiente", y que "el Código del SII señala que se consideran rentas del trabajo dependiente 'las gratificaciones percibidas por la prestación o con motivo de la prestación de trabajo, cuando no sean otorgadas por el respectivo empleador'".

"Las gratificaciones no otorgadas por el empleador se consideran trabajo dependiente, porque la motivación para otorgarlas radica en la prestación de trabajo de esta naturaleza. Las gratificaciones están sujetas a tributación autonómica al tipo del 10%", concluye DECO PROTeste.