"Suponemos que el número máximo de casos se espera para la primera o la segunda semana de enero", dijo el especialista en la reunión de Infarmed en Lisboa.
Por otro lado, por cada persona infectada habrá tres que tendrán que estar en cuarentena, faltando al trabajo o a la escuela, señaló el investigador del Instituto Nacional de Salud Dr. Ricardo Jorge (INSA).
El INSA estima un número "muy elevado" de nuevos contagios, entre 40.000 y 130.000, en el pico previsto para los primeros días de enero, con el consiguiente aumento "muy elevado" del número de personas aisladas.
"Podemos suponer que el número total de personas que estarán aisladas en cuarentena puede oscilar entre el 4% de la población y alrededor del 12% de la población", una cifra que se puede observar o "en la semana actual o la segunda semana de enero", destacó Baltazar.
Baltazar Nunes recordó que, en septiembre de 2021, en una reunión en Infarmed, el INSA presentó tres escenarios probables para el otoño/invierno.
Las proyecciones también muestran que el riesgo de hospitalización es menor en Omicron unas 0,4 veces en comparación con Delta, dijo Baltazar Nunes, explicando que para los diferentes escenarios de pérdida de protección de la vacuna, hay diferentes niveles de incidencia.
Portugal sigue mostrando "una tendencia creciente", pero la expectativa es que las medidas aplicadas reduzcan los contactos en torno al 30% y se produzca una inversión de la tendencia.
En cuanto a las hospitalizaciones, también hay diferentes escenarios en función de la pérdida de protección de la vacuna, que pueden variar entre 1.300 y unos 3.700 ingresos en planta, previstos para la última semana de enero, primera de febrero.
A nivel de cuidados intensivos, puede oscilar entre 180 y unas 450 camas, previstas para la primera o segunda semana de febrero, pero esta cifra está "muy por debajo" del máximo observado en las hospitalizaciones de finales de enero y principios de febrero de 2021.