En la localidad española de Ayamonte, un municipio de la comunidad autónoma de Andalucía que limita con Castro Marim y Vila Real de Santo António, el descuento que hacen las estaciones de servicio y que luego cubrirá el Gobierno español alcanza los 10 euros sobre un depósito de 80 euros.
A este descuento, concedido por el Gobierno español para ayudar a la población a hacer frente a la subida de los precios de los carburantes, se suma el hecho de que el precio en España es inferior al que se cobra en Portugal: la gasolina al 95% en ese país está ahora a 1,810 euros por litro y el gasóleo simple a 1,789 euros por litro.
"He puesto 40 euros de gasóleo y, cuando he ido a pagar, me han devuelto cuatro euros", cuenta Marta Costa a Lusa, una portuguesa que estaba en una gasolinera de Ayamonte.
Las colas de coches portugueses se suceden en las gasolineras cercanas a la frontera y los lusos pueden así pagar el combustible más barato que en Portugal, donde hoy el precio del litro de gasóleo simple alcanza los 1,979 euros y el de la gasolina los 2,054 euros.
Descuento extra
Lusa también habló con Luís Antunes, quien dijo que fue a Ayamonte a repostar el coche porque "el precio es más barato que en Portugal" y acabó "sorprendido por el descuento" que le hizo el Gobierno español.
"Vine aquí porque es más barato que en Portugal y cuando pagué me dijeron que me descontarían los 20 céntimos por litro. El Gobierno portugués debería seguir este ejemplo y apoyar también a la gente para hacer frente a esta escandalosa subida del precio de los carburantes", dijo la misma fuente.
Luís Nunes también aprovechó su viaje al Algarve para pasar el fin de semana para repostar su coche de vuelta a Lisboa y se congratuló de que, "además de que el precio es más bajo que en Portugal", también "se beneficia de un descuento que hace el Gobierno español y que se lleva inmediatamente al bolsillo cuando se paga".
Las estaciones de servicio de España ofrecen desde el viernes a sus clientes un descuento de al menos 20 céntimos por litro de combustible.
El objetivo es contener la subida de los precios de la energía y mitigar el impacto en los bolsillos de consumidores y empresas, tras las subidas registradas en los precios de los carburantes y la energía desde el inicio de la guerra en Ucrania.
El descuento está en vigor en las 11.650 estaciones de servicio de todo el país hasta al menos el 30 de junio.