Los inversores se muestran esperanzados debido a un análisis que prevé un descenso continuado de la inflación. El sentimiento económico pasó de -1,1 puntos a mediados de octubre a 9,8 puntos a mediados de noviembre. La cifra en descenso es un indicador de la disminución del pesimismo, ya que las cifras por encima de cero significan optimismo económico.