"Mañana, día 2 [de abril], se hará un nuevo intento de retirar todas las embarcaciones que están allí, ya que los propietarios, que tienen la responsabilidad de retirarlas, no han sido capaces de resolver el problema", declaró Luís Encarnação a la agencia Lusa.

Según el alcalde, la proximidad de la temporada de baño hizo que el ayuntamiento, en coordinación con la capitanía del Puerto de Portimão, decidiera liderar el proceso de retirada de las embarcaciones, cargando posteriormente los costes de la operación a los respectivos propietarios.

En total, son tres veleros y una embarcación de recreo de mayor tamaño los que han sido arrastrados hasta la orilla.

"Estamos cerca de la temporada de baño y, por tanto, no podemos tener embarcaciones allí", insistió Luís Encarnação.

Los cuatro barcos se han convertido en una atracción turística, sobre todo los fines de semana, cuando mucha gente acude a esa playa para fotografiarse junto a las embarcaciones varadas en la arena.

El 12 de marzo se intentó retirar las embarcaciones, lo que resultó infructuoso en aquel momento.

Las fechas elegidas para retirar los barcos están relacionadas con la existencia de las llamadas "mareas vivas", una pleamar que coincide con la luna nueva o llena.

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