Según un comunicado de prensa del ayuntamiento de Albufeira: "El comportamiento de turistas extranjeros a plena luz del día el pasado fin de semana desencadenó una reunión convocada de urgencia por el Ayuntamiento con todas las fuerzas de seguridad y asociaciones del sector turístico. Una reunión con el Ministro de Administración Interna y la creación de un comité para elaborar un Código de Conducta son los próximos pasos.


"En breve se regulará el comportamiento de los turistas en Albufeira y, para ello, se creará una comisión encargada de establecer un Código de Conducta".


Los hechos ocurridos el pasado fin de semana en la Rua da Oura llevaron al Ejecutivo a celebrar una reunión de urgencia el pasado día 19 y convocó a la GNR, a la Autoridad Portuaria de Portimão, a la Asociación de Cantineros del Algarve y a varias asociaciones del sector turístico, como AHRESP Albufeira - Asociación de Hoteles, Restaurantes y Servicios Similares de Portugal, APAL - Agencia de Promoción de Albufeira, ACALB - Asociación Comercial de Albufeira, AHISA - Asociación de Industrias Hoteleras y Similares del Algarve y APECATE - Asociación Empresarial Portuguesa de Congresos, Espectáculos y Eventos Turísticos. La invitación pretendía sensibilizar a los empresarios asociados a estas estructuras para que no permitan los excesos de comportamiento que se vienen produciendo en el interior y en el espacio que rodea a sus establecimientos.

Tras escuchar las opiniones de todos los presentes, José Carlos Rolo determinó que se creará un Código de Conducta que se aplicará en el espacio público del municipio, para lo que se creará una comisión encargada de su elaboración, que se reunirá próximamente con la consejera de Administración Interior, Margarida Blasco. Otra medida será el inicio del proceso de recalificación urbanística de la Avenida Sá Carneiro.

José Carlos Rolo afirmó que "lamenta que la imagen de Albufeira se vea perjudicada por incidentes como los ocurridos en las zonas de bares, cuando en el resto del municipio la seguridad y la tranquilidad han sido un récord continuo, como demuestra la demanda anual de turistas, sobre todo de familias, tanto extranjeras como portuguesas".

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