"En cuanto a Alqueva, se trataba simplemente de controlar lo que se gastaba en la parte española, hacer cuentas, y España, naturalmente, está dispuesta a pagar lo que nos debe por el agua de Alqueva", dijo Maria da Graça Carvalho.

Según la ministra, la cantidad a pagar a Portugal será de dos millones de euros al año, una cifra que, desde la perspectiva de España, no es "desorbitada".

Maria da Graça Carvalho dijo que el acuerdo que se firmará entre ella y su homólogo español, el 26 de septiembre, en la capital española, Madrid, implicará no sólo la regulación de la captación de agua en Alqueva, sino también cuestiones relacionadas con los ríos Tajo y Guadiana.

A la pregunta de los periodistas de si Portugal había hecho concesiones para alcanzar un consenso bilateral, la ministra de Medio Ambiente respondió que no fue necesario ceder "en absoluto" y que las negociaciones fueron "muy bien", subrayando que España está interesada "en resolver los problemas".