Maria da Graça Carvalho dijo que la interconexión entre las presas y la presa de Bravura, en Lagos, en el Algarve Barlavento (occidental), será posible tras la autorización de España para el uso de 60 hectómetros cúbicos del río Guadiana.

"Siempre que se garanticen los caudales ecológicos del río Guadiana, permite el uso de 30 hectómetros cúbicos para tomar agua de Pomarão y 30 hectómetros cúbicos para reforzar Alqueva. Así, a través de este refuerzo de Alqueva, será posible, y es lo que estamos estudiando en este momento, conectar Alqueva a la cuenca del Mira, por lo tanto a Santa Clara, y de Santa Clara a la presa de Bravura", dijo el responsable gubernamental.

El ministro de Medio Ambiente y Energía hablaba en Faro, en la ceremonia de anuncio del lanzamiento de la licitación para la construcción de la obra de toma de agua de Pomarão, en el Sotavento (este) del Algarve, en la que también se firmaron los protocolos que permitirán implantar soluciones de acceso al agua para las poblaciones de Mesquita y Espírito Santo, en Mértola (Beja).

"Por lo tanto, vamos a suministrar agua a Barlavento y Sotavento. El refuerzo de la conexión Barlavento - Sotavento, en horizontal, que ya existe, pero que se está reforzando, dará mayor resiliencia hídrica al Algarve", destacó.

Según Maria da Graça Carvalho, también está prevista una intervención integrada en las rías y arroyos del Bajo Alentejo y del Algarve -con financiación del Programa Operativo Regional, por valor de 40 millones de euros-, mediante la creación de dos reservas fluviales, una en el Río Vascão, en el Algarve oriental, uno de los afluentes del Guadiana, y otra en la Ribeira de Odeceixe, en el Algarve occidental.

"Serán dos reservas fluviales muy importantes para nuestro país", destacó, añadiendo que, además, la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente(APA), en colaboración con el Ayuntamiento de Mértola, en el distrito de Beja, está elaborando estudios para la renaturalización de las riberas del Guadiana.

Según el responsable gubernamental, este proyecto está incluido en la reprogramación del Plan de Recuperación y Resiliencia (PRR), con un presupuesto de 10 millones de euros que se propone a la Comisión Europea para hacer el Guadiana "bonito y renaturalizado", no utilizando el agua sólo "para fines socioeconómicos".