Desde principios de año, el precio de la gasolina 95 simple ha subido 8 céntimos por litro, mientras que el del gasóleo simple ha bajado 9 céntimos por la misma cantidad.

Estos cambios representan un equilibrio de la balanza tras un periodo de oscilación el año pasado, así como un aumento de la temperatura que disminuye la demanda de gasóleo.

En cualquier caso, el precio del combustible es mucho más bajo ahora que en febrero de 2022, y sustancialmente más bajo que el punto álgido de la subida del precio del combustible en junio del año pasado. Desde entonces, la gasolina se ha abaratado 44 céntimos por litro, y el precio del gasóleo ha bajado 56 céntimos.

El Gobierno sigue apoyando a las empresas de carburantes, aunque los descuentos fiscales han ido desapareciendo gradualmente, lo que puede explicar en parte el aumento del precio de la gasolina.