"Las tres primeras semanas de julio fueron el periodo de 15 días más caluroso jamás registrado y el mes va camino de ser el julio más caluroso jamás registrado", afirma en un comunicado el servicio europeo Copernicus (CS3).

Según Copernicus, las altas temperaturas están relacionadas con las olas de calor en Norteamérica, Asia y Europa, que, junto con los incendios forestales en países como Canadá y Grecia, han tenido importantes repercusiones en la salud de las personas, el medio ambiente y la economía.

"La temperatura media mundial superó temporalmente el límite de 1,5ºC por encima del nivel preindustrial durante la primera y la tercera semana del mes, señaló.

El 6 de julio, la temperatura media diaria global del aire en superficie superó el récord establecido en agosto de 2016, convirtiéndose en el día más caluroso jamás registrado, seguido de los días 5 y 7 del mismo mes.

Hasta este año, el julio más caluroso había sido el de 2019.

"Las temperaturas récord forman parte de la tendencia de aumento drástico de las temperaturas globales", ha afirmado el director del C3S, Carlo Buontempo.

Carlo Buontempo ha recordado que "es poco probable que el récord de julio se mantenga aislado este año".

"Las previsiones estacionales del C3S indican que es probable que las temperaturas en las zonas del interior estén muy por encima de la media, superando el percentil 80 de la climatología para la época del año", añadió.

Por su parte, el secretario general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), Petteri Taalas, señaló que "la necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero es más urgente que nunca".

"El tiempo extremo que afectó a muchos millones de personas en julio es, por desgracia, la cruda realidad del cambio climático y un atisbo del futuro", afirmó.

La OMM estima en un 98% la probabilidad de que al menos uno de los próximos cinco años sea el más cálido registrado y en un 66% la probabilidad de que se supere temporalmente en 1,5 ºC la media verificada en 1850-1900.

La semana pasada, el climatólogo jefe de la agencia espacial norteamericana(NASA), Gavin Schmidt, también había dicho que julio estaba a punto de batir el récord del mes más caluroso jamás registrado, no sólo desde que hay registros, sino también en "cientos, si no miles de años".

Schmidt afirmó que la situación no se debe sólo a El Niño, el fenómeno climático cíclico que se origina en el océano Pacífico y provoca un aumento de las temperaturas globales, sino a que se siguen "emitiendo gases de efecto invernadero a la atmósfera".