Según la Fuerza Aérea Portuguesa, se trata del "único programa de entrenamiento de vuelo tripulado del mundo y gestionado multinacionalmente con el objetivo de formar pilotos de combate para la OTAN".
La ceremonia de graduación tuvo lugar el 28 de julio, tras el entrenamiento realizado en la base aérea de Sheppard, en Texas (Estados Unidos).
Los tres pilotos portugueses "podrán ahora exhibir las 'Alas de Plata' de la Fuerza Aérea Americana y volar los cazas F-16M de la Fuerza Aérea, desde la Base Aérea nº 5, en Monte Real".