La aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair obtuvo un beneficio neto de 2.180 millones de euros en el primer semestre del año fiscal (abril-septiembre), un 59% más que en el mismo periodo del año anterior, cuando ganó 1.370 millones, anunció la compañía.
Ryanair atribuye la recuperación de los beneficios al "alto rendimiento" logrado durante la Semana Santa del primer trimestre, así como al tráfico de pasajeros en verano, que registró "cifras récord", y al aumento del precio de los billetes, que "compensó los costes de combustible" en la primera mitad del año fiscal, que concluirá el 31 de marzo de 2024.
Ryanair, primera aerolínea económica europea, indicó en un comunicado que sus ingresos aumentaron un 30%, hasta 6.160 millones de euros, en el mismo periodo, durante el cual transportó a 105,4 millones de pasajeros (+11%).
De cara al cierre del actual ejercicio, O'Leary indicó que las previsiones sitúan el beneficio bruto del próximo mes de marzo en una horquilla de entre 1.850 y 2.050 millones de euros, muy por encima del anterior récord de 1.450 millones de euros registrado en 2018.