En declaraciones a Lusa, el empresario Carlos Vieira, miembro de la junta directiva de la Asociación Portuguesa de Empresas de Congresos, Espectáculos Turísticos y Eventos(APECATE), explicó que se había producido un "aumento exponencial" de las visitas, en parte porque cada vez más personas empezaban a alquilar medios no motorizados para este fin.

"Nunca ha habido tanta afluencia. En los dos últimos años la afluencia ha crecido exponencialmente y, claro, ha empezado a haber problemas, además de un peso muy grande sobre la cueva", reconoció, considerando que los problemas se debían a conflictos en el acceso con piraguas, kayaks o tablas de paddle surf, además de embarcaciones.

Ante el aumento desordenado del número de visitantes, las autoridades decidieron crear un grupo de trabajo para regular el acceso a una de las cuevas más visitadas de la región, que ya ha elaborado un informe cuyas propuestas, que también fueron debatidas con APECATE, están en estudio y en consulta pública hasta el 21 de febrero.

Según Carlos Vieira, la entrada del Gobierno dimisionario en la gestión y la proximidad de la temporada alta no permiten definir las tasas de ocupación y otras cuestiones a través de un proceso más completo, por lo que las autoridades deben elaborar un aviso con normas sencillas para regular la actividad hasta el verano.

El responsable considera que normas como la prohibición de desembarcar en la cueva, la limitación del tiempo de visita o la creación de canales de acceso para embarcaciones, distintos de los que utilizan los kayaks o las tablas de paddle surf, son "consensuadas" y deben aplicarse mediante la publicación de un aviso.

"¿Por qué hay tanta confusión en la cueva? Hay mucha confusión porque hay un tráfico enorme, todo el mundo quiere ir a las cuevas y ha empezado a haber mucho material no motorizado, alquilado a terceros, sin guía, sin formación", argumentó.

Según el empresario, que trabaja en el sector marítimo-turístico en Albufeira, en el distrito de Faro, desde hace más de 30 años, la mayoría de estos visitantes "no sabe navegar en kayak" y, en "situaciones en las que hay rocas, mar y olas, acaban surgiendo problemas".

Carlos Vieira observó que, en los dos últimos años, la promoción dada a la región del Algarve ha incrementado el interés por visitar las grutas de Benagil, habiendo aumentado también el número de operadores inscritos en el Registro Nacional de Agentes de Entretenimiento Turístico, en Turismo de Portugal.

"En tres o cuatro meses no podríamos hacer mucho más de lo que hicimos", afirmó, destacando que "lo que se espera es que, de hecho, ya haya algunas medidas que se aplicarán este año, a través de un aviso emitido por algunas entidades, a saber, la Capitanía, la APA[Agencia Portuguesa de Medio Ambiente], el ICNF[Instituto de Conservación de la Naturaleza y los Bosques] y el municipio de Lagoa".

Carlos Vieira aclaró que APECATE es "partidaria de normas" y "condiciones que mejoren la seguridad y la visita", pero que también permitan "ofrecer más calidad al cliente", y rechaza "todo lo que sea burocracia" y normas que provoquen "dificultad de gestión" sin beneficiar la calidad de las visitas a las cuevas y la seguridad.

El dirigente de la asociación explicó que el tiempo para desarrollar las normas de acceso es ya "muy corto" y consideró "casi imposible" realizar una evaluación de la capacidad de carga de la cueva y comprobar in situ esta capacidad en tres o cuatro meses.

Por ello, Carlos Vieira cree que se adoptarán, "en una primera fase", un conjunto de "medidas sencillas" para "organizar y ordenar la visitación" y garantizar el funcionamiento hasta el verano, realizando, en una fase posterior, y ya con un nuevo Gobierno en funciones, un trabajo más completo que defina las cargas e introduzca también las modificaciones que los operadores consideren necesario en la práctica introducir.


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