Las temperaturas volverán a subir, según las previsiones del Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera(IPMA), pero no por ahora. Hasta el miércoles, casi todo el país estará afectado por nubes y lluvias, con posibilidad incluso de granizo y tormentas. A partir del fin de semana, los termómetros deberían empezar a subir, alcanzando los 30ºC durante la última semana de mayo.

Para este lunes, 20 de mayo, se prevén lluvias y temperaturas entre 16ºC de mínima y 23ºC de máxima en todo el archipiélago de las Azores, que hoy celebra el Día de la Región, mientras que para Madeira el IPMA prevé cielos parcialmente nubosos, con temperaturas en torno a 21ºC de máxima y 16ºC de mínima.

También se esperan lluvias en la mayoría de los distritos del norte de Portugal continental, así como en Sines, y no se espera que los termómetros suban más allá de los 22ºC de máxima, pudiendo bajar hasta los 7ºC de mínima, en Guarda y Bragança. En Oporto no se prevén lluvias, pero las temperaturas no deberían superar los 18ºC de máxima, con una mínima de 10ºC. En Lisboa, los termómetros suben hasta los 21ºC y pueden bajar hasta los 13ºC.

Según el IPMA, se espera un escenario similar para el martes 21 de mayo. La lluvia sigue azotando las Azores y el norte del país. Mientras que el resto del territorio nacional oscila entre cielos parcialmente nubosos y poco nubosos. En Faro, los termómetros deberían alcanzar los 24ºC, en Évora los 22ºC, en Lisboa los 20ºC y en Oporto los 17ºC, esta vez con lluvia.

El miércoles 22 de mayo, las temperaturas comienzan a subir, alcanzando los 26ºC en Faro, 24ºC en Beja, 23ºC en Beja y Setúbal, y 22ºC en Sagres y Santarém. Continúan las lluvias en las Azores y en Viana do Castelo, Aveiro, Coimbra y Leiria.

El aumento gradual de las temperaturas comenzará la próxima semana, y el IPMA prevé que los termómetros alcancen los 30ºC en varios distritos en la última semana de mayo.