Compuestos por pilas de porcelana, junto con otras piezas de cerámica, cobre, madera de ébano y partes de animales, los pecios son un testimonio de la vasta red de comercio marítimo supervisada por la dinastía Ming.

La excavación, llevada a cabo entre 2023 y 2024, fue un esfuerzo conjunto de dos institutos de investigación y un museo local de la isla de Hainan, y consistió en el envío de sumergibles tripulados y no tripulados para recoger las reliquias y documentar los pecios.