Tras un periodo de temperaturas relativamente suaves, el IPMA indica que "se espera un aumento gradual de las temperaturas entre los días 29 y 31 de agosto, asociado a una masa de aire cálido procedente del sur".

Hasta el 2 de septiembre "no debería haber cambios significativos en las temperaturas, con los valores máximos contribuyendo a una ola de calor en la mayoría de las estaciones del IPMA, excepto en el Algarve y posiblemente en algunos lugares del Bajo Alentejo".

"También es probable que las condiciones sean favorables a la ocurrencia de tormentas, aunque existe incertidumbre espacial y temporal sobre estos fenómenos, que estarán determinados, entre otras cosas, por la posición de la depresión en cuestión", señala también el Instituto.

Según estas predicciones, también habrá posibilidades de que "aparezca polvo en suspensión procedente de África".