António Leitão Amaro admitió que la fuga de los cinco presos de la cárcel de Vale de Judeus, en Alcoentre, es preocupante.

"Está claro que no es ajeno un ciclo de desinversión en los servicios penitenciarios", dijo Leitão Amaro, a lo que añadió el factor de la "escasez de recursos humanos en los servicios penitenciarios".

Leitão Amaro destacó que el ministro de Justicia "solicitó inmediatamente" un análisis de los servicios, "con lo que se acordó [que la información sería] entregada", por lo que Rita Alarcão Júdice hará las aclaraciones necesarias y proporcionará una información "más completa".

El ministro dijo no querer anticipar conclusiones, pero acabó afirmando que se trata de "una situación preocupante y delicada, que merece toda la atención del Gobierno y una comunicación muy esclarecedora", que hará el ministro de Justicia.

Sin embargo, en la rueda de prensa del domingo, el director general de Reinserción y Servicios Penitenciarios(DGRSP), Rui Abrunhosa, negó que la fuga de los presos estuviera relacionada con la falta de guardias penitenciarios, afirmando que en el momento de la fuga había 33 guardias y que se trataba de "un turno normal" para una prisión de esas características.

Preguntado por la tardanza del Gobierno en pronunciarse sobre la fuga de Vale de Judeus, el ministro de la Presidencia subrayó que "los responsables de la administración pública dieron aclaraciones al pueblo portugués" y que la actitud del Gobierno fue la de "exigir una evaluación inmediata, muy rápida, de lo ocurrido".

Leitão Amaro dijo también que, aparte de la información que el ministro de Justicia proporcionará "de forma transparente", hay un aspecto que requiere discreción, que es "el seguimiento del proceso de intento de captura de los prófugos".

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