Su nombre de nacimiento era Gaetano Thiene. Su padre, un destacado abogado, y su madre le proporcionaron una sólida base tanto en asuntos mundanos como espirituales. Fue educado en la Universidad de Padua, donde estudió Derecho.

La vida de San Cayetano estuvo marcada por un profundo compromiso con la reforma de la Iglesia y el servicio a los pobres. Tras licenciarse en Derecho, prefirió dedicarse a la vida religiosa antes que a la carrera jurídica. En 1524, cofundó con varios compañeros las Teatinas, una orden dedicada a la reforma del clero y al cuidado de los pobres. Su misión consistía en llevar una vida de pobreza y predicar el Evangelio.

San Cayetano era conocido por su profunda piedad, su rigurosa observancia de la oración y el ayuno, y su inquebrantable compromiso con los pobres y la reforma de la Iglesia. A pesar de enfrentarse a una gran oposición y a numerosos desafíos, su dedicación a la renovación espiritual de la Iglesia permaneció inquebrantable. Su obra y su vida de santidad siguen inspirando a quienes buscan vivir su fe con fervor y dedicación.