El proyecto de conservación prevé la consolidación estructural del monumento, con una inversión de 250 mil euros, garantizada por fondos del Plan de Recuperación y Resiliencia (PRR), resultante de un acuerdo entre el municipio y el Fondo de Salvaguardia del Patrimonio Cultural.

La intervención implicará obras de salvaguardia, a saber, la corrección de anomalías y la conservación y restauración de diversos elementos, como tejados, canterías, vanos, escaleras, placas, paneles, campana, cruz, reloj y también revestimientos, con vistas a contrarrestar su proceso de degradación.

Según la administración local, el revestimiento, con la aplicación de yeso sobre el ladrillo, "pretende preservar el ladrillo en cuestión, que se ha perdido por desintegración, utilizando para ello la solución que siempre se utilizó hasta finales del siglo XX, cuando una intervención municipal eliminó el revestimiento de yeso para colocar ladrillo visto".