Pero los alcaldes advierten que el diploma trae dudas y desafíos, abriendo la puerta a la construcción de otros proyectos inmobiliarios además de viviendas. Además, esta nueva ley del suelo no está articulada con otras leyes que ejercen presión sobre la gestión urbana.
La advertencia la hizo la Asociación Nacional de Municipios Portugueses(ANMP), que se pronunció sobre esta nueva ley del suelo. Este diploma publicado en el Boletín Oficial de la Unión este lunes, 30 de diciembre, ya cuenta con la contribución de los alcaldes. Y entrará en vigor dentro de un mes.
A pesar de admitir a idealista que esta nueva ley podría traer más casas a las afueras y a precios más bajos, la ANMP dirigida por Luísa Salgueiro ahora advierte que este decreto-ley abre la puerta a la construcción de otros tipos de proyectos en suelo rústico, dijo a Jornal de Notícias. Hay que tener en cuenta que el título sólo exige que la mayor parte de la superficie (al menos el 70%) se dedique a vivienda pública, de alquiler asequible o de precio moderado.
Además, la construcción de viviendas (y otros proyectos) tiene que tener en cuenta los costes adicionales de infraestructura, ya que hay que urbanizar terrenos. Y los alcaldes también advierten de que la nueva ley del suelo tiene lagunas, lo que podría generar diferentes interpretaciones, y también traerá "una gran presión a la planificación y gestión urbanística", ya que tocará los Planes Directores Municipales ya aprobados por diversas entidades, según la misma publicación.
El Presidente de la República también había advertido, al promulgar el decreto-ley el jueves (26 de diciembre), que la nueva ley del suelo causará "una alteración significativa" en el régimen de ordenamiento y planificación territorial.
Por ello, la ANMP afirma ahora que duda de que la nueva ley del suelo vaya a resolver el problema de la falta de viviendas asequibles para la clase media.