"Confirmo que los movimientos de tierra [en Alagoas Brancas] han comenzado y para nosotros es un asunto que está cerrado [...], ya que se trata de un proyecto legal y legítimo", dijo a Lusa el alcalde de Lagoa, Luís Encarnação.

Según el alcalde, el promotor del proyecto -que ha sido impugnado desde su inicio, en 2007, por organizaciones ecologistas-, tiene todo el derecho a seguir adelante con el proyecto que consta de 11 lotes.

En un comunicado, varias organizaciones ecologistas han defendido que la "destrucción de este humedal pone en peligro la seguridad de la ciudad en situación de inundación", y aseguran que las obras son "ilegales".

Luís Encarnação destacó que el proyecto inicial fue aprobado en 2009 y que superó con éxito todas las fases de autorización previstas por la ley para permitir la concesión del permiso.

"El grupo que promueve la impugnación de las obras sacó un amparo que llegó al Tribunal Supremo Administrativo", con el resultado favorable a la realización de las obras aclaró el alcalde.

Un estudio de Almargem, asociación para la defensa del patrimonio cultural y medioambiental del Algarve, que impugna las obras, afirma que existe un "valor medioambiental" en los terrenos en cuestión.

Ahora se ha organizado una protesta contra las obras que tendrá lugar desde el Largo do Auditorio Municipal Carlos do Carmo, en Lagoa, a las 17 horas del 22 de octubre.