Tras una visita a las obras, que comenzaron en agosto de 2022 y está previsto que finalicen en febrero de 2024, el director de inspección de Infraestruturas de Portugal (IP) subrayó a Lusa que el viaducto sigue siendo seguro.
"El viaducto no está en riesgo", destacó Carlos Sousa, subrayando que las obras, presupuestadas en 6,9 millones de euros, le darán "mayor resistencia" a través de refuerzos sísmicos.
Entre las intervenciones en curso se encuentra el uso de acero para reforzar las estructuras de hormigón existentes en los pilares, así como su pintado.
"Estamos mejorando la cimentación, la estructura de los dos pilares principales, (...) que conecta con el arco principal, el arco de la Avenida de Ceuta --unos 100 metros de luz--", detalló Carlos Sousa.
Con las obras actualmente en curso en el pilar más cercano a Lisboa, el tráfico en la Avenida de Ceuta se mantiene normal, algo que no ocurrirá en el tablero que conecta con la Autopista 5 (que viene de Cascais).
Durante la visita, el ingeniero aseguró a los periodistas que no se cortará la circulación, sino que se condicionará entre el 15 de julio y el 15 de septiembre, aunque este periodo aún no está confirmado.
Según Carlos Sousa, "el mayor problema para el público será entrar y salir de Lisboa durante este periodo estival, en el que la pavimentación se hará por la noche, para que funcione durante el día", así como las obras de sustitución de las juntas de dilatación.
El Viaducto Duarte Pacheco, que lleva el nombre del Ministro de Obras Públicas de la época, es una de las principales vías de acceso a Lisboa - fue proyectado en 1937 por el ingeniero João Alberto Barbosa Carmona y las obras se realizaron entre abril de 1939 y diciembre de 1944 .