El decreto reglamentario de la ley de extranjería, publicado hoy en el Diário da República, modifica la "regulación del régimen jurídico de entrada, estancia, salida y expulsión de ciudadanos extranjeros del territorio nacional".
El diploma contempla las nuevas funciones de la AIMA, creada el 29 de octubre para sustituir al Servicio de Extranjeros y Fronteras(SEF) y a la Alta Comisaría de Migraciones(ACM), y de la GNR y la PSP, que pasan a ser las instituciones responsables del control de fronteras.
"A través de este decreto reglamentario, se modernizan y simplifican los procedimientos administrativos con el fin de garantizar que la AIMA pueda instruir y decidir los procesos relativos a la estancia de ciudadanos extranjeros en el territorio nacional de manera oportuna y con los requisitos de cumplimiento", reza el diploma publicado hoy.
En un comunicado remitido a Lusa, AIMA explica que este cambio "constituye un paso decisivo en la mejora de los servicios" a los ciudadanos inmigrantes, ya que permite "modernizar y simplificar los procedimientos administrativos, posibilitando la instrucción y resolución de los procesos relativos a la estancia de ciudadanos extranjeros en el territorio nacional en tiempo y forma y con mayores requisitos de seguridad".
Con este nuevo decreto regulador, será posible "disponer de servicios digitales en el Portal AIMA, para el envío, recepción y pago de solicitudes de autorización de residencia, eliminando agendas y desplazamientos" a sedes físicas, "liberando a los empleados de tareas sin valor añadido, como la tramitación del pago de tasas".
Próximamente, promete AIMA, se habilitarán servicios digitales en el portal "empezando, como ya se ha anunciado, por las solicitudes de permisos de residencia por reagrupación familiar".
Los procesos de reagrupación familiar han sido uno de los principales motivos de queja de los inmigrantes legales en Portugal, que acusan al país de violar sus propias leyes y acuerdos internacionales al no conceder decenas de miles de solicitudes pendientes.
Además, el diploma autoriza la presentación de solicitudes digitales para la concesión y renovación de permisos de residencia y permite que estas solicitudes también las realicen empresarios, centros de investigación o centros educativos en los que estén integrados inmigrantes.
El diploma también autoriza a AIMA "a celebrar los protocolos necesarios para garantizar la acreditación de situaciones jurídicas mediante el acceso directo a diversas bases de datos de instituciones públicas, garantizando una mayor rapidez y seguridad de la información", como "la acreditación de la existencia de un trabajo, la residencia en el territorio nacional, la situación de alta y cotización regularizada en la Seguridad Social y la Agencia Tributaria, la asistencia a un centro educativo, el voluntariado o las prácticas".