El proyecto consiste en un condominio privado con 174 apartamentos turísticos (con viviendas en la planta baja o en el 1er piso), a 400 metros de la playa, en el corazón de Porto Covo.
Según un informe de ECO, Porto Covo fue elegido para este proyecto principalmente porque es un destino turístico en desarrollo, cada vez más solicitado por portugueses y extranjeros. El centro histórico, con una amplia oferta de restaurantes, tiendas y entretenimiento, así como las innumerables playas y la Ilha do Pessegueiro son algunos de los atractivos de este destino.