El Ministro de la Presidencia ha garantizado que se seguirá vigilando la situación y que no se pondrá en peligro el suministro a la población, al tiempo que ha añadido que hay agua disponible para un año para el consumo.
El ministro de la Presidencia, António Leitão Amaro, argumentó que "para ser justas y aceptadas", las restricciones al consumo de agua deben ser proporcionales. "Si llueve más y si la dimensión y el dramatismo de la sequía disminuyen de alguna manera, debemos ajustar las medidas". Por ello, como ya anunció el primer ministro Luís Montenegro en la última reunión de seguimiento de la situación en el Algarve, el Gobierno avanzará en la flexibilización de las restricciones.
"Una de las intervenciones decididas hoy es un cierto alivio de estas medidas de restricción, de acuerdo con los diferentes tipos de consumo. Este ajuste garantiza que, aunque no vuelva a llover este año, ni una gota más, habrá agua garantizada durante un año para el consumo urbano. Se trata de un alivio proporcional, que obviamente da prioridad al consumo urbano de las familias que reciben agua en sus hogares. Pero también hay alivios en las restricciones agrícolas y para el turismo, subrayó el ministro.
El seguimiento se realizará cada dos meses y, "cuando llegue agosto y cambie la situación", se procederá a un nuevo análisis de estas restricciones. La resolución, aprobada por el Ejecutivo de AD, prevé otros dos grupos de medidas.
El segundo grupo de medidas tiene que ver con la inversión adicional de 103 millones de euros en el ciclo del agua para reforzar la red de agua urbana para reducir las pérdidas, "que son muy significativas", construir una conducción (que costará 27 millones de euros) que dará servicio a las zonas de Silves a Portimão, pensando en la producción agrícola, y mejorar el aprovechamiento de las aguas residuales.
En tercer lugar, se acelerarán las inversiones del Plan de Recuperación y Resiliencia, con un índice de ejecución de las medidas de lucha contra la sequía en el Algarve del 5%.