La situación salió a la luz a raíz de la denuncia presentada por un grupo de turistas de Washington D.C., en Estados Unidos, que afirmaron haber sido objeto de un intento de estafa (y secuestro) por parte de un hombre que se identificó como taxista y que, al final del viaje, solicitó el pago de casi 700 euros, por conducir "un taxi especial desde el aeropuerto"

.

Preguntadas por Notícias ao Minuto, las fuerzas de seguridad informaron de que "los casos denunciados a la PSP están siendo investigados".

La policía destacó una campaña de ANA - Aeroportos de Portugal que, a propuesta de la PSP, advierte de casos similares.

Créditos: Facebook;

"Los

conductores autorizados no se acercan a los pasajeros. Sigue la señalización o reserva el servicio a través de las apps".