Pero, ¿y si hay indicios de que algo no va bien?

"Uno de los aspectos clave para mantener las plantas sanas es reconocer y solucionar los problemas más comunes", afirma Julian Palphramand, responsable de plantas de British Garden Centres.

Aquí, Palphramand comparte algunos de los problemas más comunes de las plantas y revela cómo solucionarlos...


1. Marchitamiento

El marchitamiento es un signo revelador de estrés en las plantas y puede deberse tanto al riego excesivo como al insuficiente, subraya Palphramand. "Si la tierra de la planta está seca y se desmenuza, es probable que el problema sea el riego insuficiente.

"Si la tierra está saturada y empapada, el riego es excesivo".

Para evitar que la planta se marchite, hay que asegurarse de que la tierra tenga un buen drenaje y seguir una rutina de riego equilibrada. "Una buena regla general es regar cuando el centímetro superior del suelo esté seco".


2. Hojas amarillas

Las hojas amarillas suelen indicar deficiencia de nutrientes, mal drenaje, daños en las raíces o enfermedades, destaca Palphramand. "Una causa común es la deficiencia de nitrógeno".

Para combatirla, dice que hay que usar un alimento equilibrado para las plantas y asegurar un drenaje adecuado para evitar la podredumbre de las raíces y otros problemas relacionados con la humedad. "Esto ayuda a mantener un equilibrio saludable de nutrientes en el suelo".


3. Caída de hojas

La caída repentina de las hojas puede ser alarmante y suele estar causada por cambios bruscos de temperatura, luz, humedad o disponibilidad de agua, advierte.

"Trasladar una planta a un entorno drásticamente distinto puede conmocionarla y provocar la caída de las hojas", explica.

"Para minimizar el estrés de las crías, introdúcelas poco a poco en su nuevo entorno para reducir el choque y dejar que se adapten a él".


4. Puntas marrones

Las puntas marrones de las hojas suelen ser un signo de riego irregular, alto contenido en sal o baja humedad, señala Palphramand.

"Para solucionarlo, establece un programa de riego constante y utiliza agua destilada si el agua del grifo contiene altos niveles de sales.

"Para las plantas tropicales, aumentar la humedad mediante nebulización también puede ayudar".


5. Crecimiento atrofiado o lento

"El crecimiento atrofiado puede deberse a una carencia de nutrientes, a la falta de luz o a que la planta esté enraizada en un contenedor.

"Si la planta está enraizada, trasplantarla a una maceta más grande puede proporcionarle el espacio necesario para un crecimiento sano", añade. "Comprueba y ajusta regularmente estas condiciones para que tu planta prospere".

Créditos: PA; Autor: PA;

6. Hojas manchadas

Las manchas en las hojas pueden indicar infecciones fúngicas o bacterianas, plagas o desequilibrios de nutrientes, sugiere Palphramand.

Dice que hay que quitar las hojas afectadas y tratar la planta con un fungicida adecuado. "Mantener un programa de alimentación regular garantiza que tu planta reciba los nutrientes que necesita para mantenerse sana".


7. Piernas:

Las plantas se vuelven alargadas y con poco follaje cuando intentan orientarse hacia el sol, lo que suele indicar que la luz es insuficiente, observa Palphramand.

Para solucionarlo, aconseja trasladar las plantas a un lugar más luminoso, ya que la luz es crucial para un crecimiento compacto y sano.


8. Fragilidad

"Las hojas quebradizas o crujientes suelen deberse a la falta de agua, la baja humedad o el calor excesivo", señala Palphramand. "El riego regular y la nebulización pueden ayudar a aumentar los niveles de humedad alrededor de la planta".

Pero dice que hay que evitar colocar las plantas bajo la luz solar directa e intensa o cerca de fuentes de calor para evitar que se sequen.


9. Podredumbre de la raíz

La podredumbre de las raíces es una afección grave para las plantas, causada por el riego excesivo y el drenaje deficiente, explica. "Los signos incluyen raíces negras y blandas y un olor desagradable".

Palphramand aconseja retirar con cuidado las raíces dañadas y trasplantarlas con tierra fresca que drene bien. "Comprueba siempre la humedad de la tierra antes de volver a regar: un buen drenaje y un riego adecuado son claves para prevenir esta afección".

"También es común en macetas sin agujeros de drenaje; si se produce la podredumbre de la raíz, retire la planta de la maceta y déjela secar antes de trasplantarla en abono fresco".

Créditos: PA; Autor: PA;

10. Plagas

Los insectos visibles y las telarañas en las hojas indican una infestación de plagas, advierte Palphramand.

"Entre las plagas más comunes están los pulgones, las arañas rojas, los mosquitos y las cochinillas. Trata tus plantas con jabón insecticida o aceite de neem e inspecciona regularmente en busca de signos de plagas para detectar los problemas a tiempo; aíslalas de otras plantas para evitar su propagación."


11. Moho

Una materia blanca y pulverulenta en las hojas, con aspecto de algodón, es un signo de oídio, una infección fúngica, observa Palphramand.

"Mejorar la circulación del aire alrededor de las plantas y evitar el riego excesivo puede ayudar a prevenir el mildiu.

"Las pulverizaciones fungicidas son eficaces para tratar y prevenir el oídio, y garantizan la salud de las plantas", añade.