Con 3,6 microgramos de partículas finas por metro cúbico, Faro ocupa el tercer lugar de la tabla, el mismo valor que Umea pero con aproximadamente la mitad de población que la ciudad sueca.

También en Suecia, Uppsala es la ciudad europea con el aire más limpio: 3,5 microgramos por metro cúbico.

Funchal, en la región autónoma de Madeira, ocupa el octavo lugar en una lista de 372 ciudades, con 4,4 microgramos de partículas finas por metro cúbico, y Lisboa el 38º, con siete microgramos.

En último lugar -la ciudad con el aire más contaminado- se encuentra Slavonski Brod, en Croacia, con 26,5 microgramos de partículas finas por metro cúbico.

Según la agencia, tres de cada cuatro europeos viven en zonas urbanas y la mayoría de ellos están expuestos a niveles inseguros de contaminación atmosférica.

Las partículas finas son los contaminantes atmosféricos con mayor impacto sobre la salud en términos de muerte prematura y enfermedad, y la exposición a largo plazo a la contaminación atmosférica provoca los efectos más graves sobre la salud.