"No conocemos a nadie más con la idea de tener un transporte público totalmente eléctrico y, en principio, seremos la primera ciudad portuguesa en hacerlo", presumía el alcalde de Évora, Carlos Pinto de Sá, en conversaciones con Lusa en febrero.

En la Comunidad Intermunicipal del Alentejo Central (CIM), el Programa de Apoyo a la Reducción de Tarifas en el Transporte Público (PART) permite a los residentes de los ayuntamientos constituyentes beneficiarse de un descuento del 60% en los billetes de autobús interurbano y del 40% en los abonos de tren. Los precios de los abonos urbanos han bajado un 55% de media: las lanzaderas urbanas cuestan ahora 10,86 euros, la línea azul 10,29 euros y el abono combinado 13,15 euros.

La CIM está formada por los municipios de Alandroal, Arraiolos, Borba, Estremoz, Évora, Montemor-o-Novo, Mora, Mourão, Portel, Redondo, Reguengos de Monsaraz, Vendas Novas, Viana do Alentejo y Vila Viçosa.


Desde 2016, los apoyos a la descarbonización de las flotas de transporte público en el país han ascendido a 154,7 millones de euros, de los cuales 106,7 fueron financiados por el Programa Operativo de Sostenibilidad y Eficiencia en el Uso de los Recursos (Poseur) y 48 millones por el Programa de Recuperación y Resiliencia (PRR).

Estas ayudas permitieron la adquisición de 1134 autobuses de energía verde, de los cuales 558 son eléctricos o de hidrógeno y 562 de biogás, así como sus respectivas estaciones de carga/alimentación. Parte del proyecto del PRR consiste en reforzar el aspecto de descarbonización del documento de orientación, lo que permite financiar al menos 200 autobuses más con cero emisiones.