Se espera que la recuperación de la compra de viviendas siga impulsada no sólo por los descensos previstos de los tipos de interés hipotecarios, sino también por los niveles récord de empleo en la mayoría de las economías europeas, la recuperación de los ingresos de los hogares, la reducción de su endeudamiento y el crecimiento demográfico en la mayoría de los países, sobre todo en las zonas urbanas. Pero esta elevada demanda volverá a chocar con la falta de viviendas en el mercado, ya que la construcción de viviendas seguirá siendo lenta debido a la falta de mano de obra, la burocracia y el método tradicional que tarda varios años.
En este contexto, la agencia de calificación financiera S&P estima que los precios de la vivienda deberían seguir subiendo entre 2025 y 2027 una media del 3%. Pero deberían ralentizar el aumento con respecto al registrado en 2024.
Esta ralentización es bastante visible en Portugal: en 2024, los precios de la vivienda subieron un 9%, pero sólo se espera que aumenten un 4,5% este año, un 3,6% el próximo y un 3,2% en 2027. Esto puede explicarse por el hecho de que la falta de viviendas frena las transacciones, según explicaron varios agentes inmobiliarios a idealista.
Por otro lado, también es posible que empiece a haber un mayor equilibrio entre la demanda y la oferta de vivienda en varios países europeos, lo que generaría una subida menos brusca de los precios. "Los tipos hipotecarios siguieron moderándose durante el cuarto trimestre de 2024. Y la normativa de construcción se endureció para cumplir los requisitos de eficiencia energética, fomentando la construcción de nuevas viviendas. Esperamos que estos factores sigan influyendo en la demanda durante los próximos dos años, mientras que es probable que se suavicen las restricciones de la oferta", afirman los analistas de S&P.
La caída de los tipos de interés hipotecarios fue un factor común en los 11 países europeos analizados, lo que fomentó la compra de viviendas. Pero hubo países en los que los precios de la vivienda subieron más significativamente en 2024, como Portugal, Italia, Países Bajos, España e Irlanda.
En Portugal, esto se debe a que los permisos de construcción han aumentado hasta los niveles de 2009. Aunque se trata de un buen indicador, la oferta de vivienda siguió sin satisfacer la demanda, que aumentó a lo largo del año debido no sólo a la caída de los tipos de interés, sino también a la exención del IMT para los jóvenes. Ahora, se espera que la demanda crezca aún más con la garantía pública sobre el crédito inmobiliario dirigida también a los jóvenes de hasta 35 años. Así es como los precios nominales de la vivienda pasaron del 7,8% en 2023 al 9% en 2024.