La esperanza media de vida ha ido aumentando en todo el mundo. Pero más que vivir más, es importante, sobre todo, vivir con calidad de vida. Envejecer de forma saludable es deseable y posible si adoptamos un estilo de vida sano que nos permita mantener nuestra salud.

Envejecer no es sinónimo de declive inevitable; al contrario, con los cuidados adecuados y un enfoque holístico, puede significar bienestar físico, mental y emocional.

Cuerpo, mente, vida social, seguridad, salud. Todas ellas son áreas importantes para promover un envejecimiento saludable. Conozca algunas estrategias:

- Alimente y ejercite su cerebro: A partir de los 55 años, las funciones cerebrales pueden empezar a declinar, sobre todo en lo que respecta a la memoria. Para preservar este órgano, es importante mantener una dieta equilibrada -rica en fruta, verdura, cereales integrales y grasas saludables- y estimularlo. Para ello, lea, haga puzzles, pinte, aprenda a tocar un instrumento musical, hable un nuevo idioma o practique jardinería.

- Elige una dieta sana: A medida que se envejece, hay más probabilidades de sufrir cambios de peso o carencias vitamínicas. Para evitarlo, lleve una dieta equilibrada, con proteínas, grasas saludables y un consumo equilibrado de hidratos de carbono. Evite los alimentos procesados, ricos en sal y grasas, que pueden provocar un aumento de peso, del azúcar en sangre y de la tensión arterial.

- Practique ejercicios de fuerza: Alrededor de los 50 años, el cuerpo empieza a perder masa muscular, lo que puede afectar a la fuerza física. La mejor forma de combatirlo es practicar ejercicios de fuerza, como levantar pesas o hacer sentadillas, de dos a tres veces por semana. Al practicar estos ejercicios, se mantiene la masa muscular magra y se mejora el equilibrio, una función muy importante a medida que se envejece.

- Adoptar un animal: Tener un animal de compañía, como un perro o un gato, puede ayudar a reducir la tensión arterial y los niveles de estrés. Si elige un perro, tiene además la ventaja de volverse más activo al tener que sacarlo a pasear.

- Salga de casa: Tener una vida social activa contribuye a una mayor sensación de felicidad, a vivir más años y a reducir la probabilidad de padecer algunas enfermedades, como la demencia. Por tanto, no se aísle en casa. Juegue a las cartas con amigos, vaya de excursión en grupo, únase a clubes de actividades, asista a un colegio de mayores o haga ejercicio en grupo.

- Participe en proyectos de la comunidad: El voluntariado puede ayudarle a sentirse aún más útil, influyendo en su felicidad y bienestar, y previniendo la depresión o la pérdida de memoria. Ofrézcase voluntario para ayudar en un hospital, un colegio, una biblioteca o un refugio de animales.

- Tenga un nuevo trabajo: Volver a trabajar tras la jubilación le permite conservar la memoria y mantener en forma su capacidad intelectual. No sólo porque estimula el cerebro, sino también porque le permite tener contacto con otras personas, algo esencial para envejecer con salud. Si es posible, siga haciendo lo que hacía antes de jubilarse, pero con un horario más reducido. Explore la posibilidad de una nueva profesión.


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