El BdP dispone de un servicio que se encarga de valorar los billetes y monedas degradados (por ejemplo, en incendios, inundaciones o por haber sido enterrados). Tras la tasación, se da un valor a los poseedores.

En el informe de 2023, el BdP dice que el año pasado valoró 28.768 billetes y devolvió 1,4 millones de euros a sus presentadores. En 2022, el valor había sido de 1,6 millones de euros.

Cualquier ciudadano que tenga billetes destruidos o mutilados (dañados por la humedad, quemados, comidos por animales, entre otros motivos) puede enviarlos al Banco de Portugal para que sean valorados. Para que un billete de euro pueda ser valorado, más del 50% de la superficie del billete debe estar reconstruida, para que su autenticidad pueda ser garantizada por los elementos de seguridad (en el caso de los billetes de escudo era del 75%).

Si es posible valorar el billete degradado, se destruye y se entrega a los ciudadanos el importe equivalente.

Si los billetes son irreconocibles, se consideran perdidos, se destruyen y el propietario no recibe ninguna indemnización.

Todos los casos de billetes destruidos que llegan al Banco de Portugal para su recuperación se comunican a la Unidad de Información Financiera de la Policía Judicial (PJ) y al Departamento Central de Investigación y Acción Penal(DCIAP), para prevenir posibles delitos.