Tras las presentaciones iniciales de Claudia Sil, investigadora del CCMAR de la Universidad del Algarve y representante de las ONG medioambientales en el Consejo Regional de la CCDR del Algarve; y de Nídia Braz, coordinadora de la Universidad del Algarve, presidenta de CIVIS, en representación de la Plataforma Agua Sostenible-PAS; cerca de 40 personas participaron en el debate organizado por la Plataforma "Mais Algarve".

"Los estudios que fundamentan y apoyan las políticas y la planificación, a saber, el Plan de Gestión de la Región Hidrográfica - PGRH (3er ciclo-2022-2027), el Plan Intermunicipal de Adaptación al Cambio Climático - PIAAC y el Plan Regional de Eficiencia Hídrica del Algarve - PREHA, o no mencionan la desalación o se refieren a ella como la última de las medidas a considerar estudiar después de que las demás resulten finalmente insuficientes", afirma la plataforma en un comunicado.

"Además, en el resumen de cuestiones significativas relativas a la gestión del agua (QSiGA) identificadas para la revisión del PGRH (3er ciclo-2022-2027), la cuestión de la desalinización ni siquiera aparece".

En general, estos estudios señalan medidas de adaptación propuestas que incluyen: reducir las pérdidas de agua en los sistemas de abastecimiento urbano y en las infraestructuras de riego agrícola; reducir las necesidades de agua en las zonas verdes urbanas; aplicar técnicas de retención de agua que promuevan la recarga artificial de los acuíferos y el autoabastecimiento; reutilizar el agua de los efluentes de las EDAR y reevaluar la viabilidad de nuevas presas y promover su construcción.

En concreto, el PIAAC considera "reevaluar la viabilidad de una planta desalinizadora y promover su construcción", sólo si el escenario climático resulta "más severo y sigue aumentando la superficie agrícola de regadío".

"Es con el PRR que surge la propuesta concreta y su presupuesto, a pesar de los estudios prospectivos que sustentan la toma de decisiones. La desalinización cayó drásticamente. Porque hay un PRR, surge una propuesta que no estaba prevista en los planes estructurales de la región. Algo espurio", dice "Mais Algarve".

"Los estudios indican que la pérdida de agua en los abastecimientos urbanos alcanza de 25 a 30%, correspondiendo a valores alrededor de 30hm3, y en los sistemas de irrigación el valor es semejante. También vale la pena considerar que restringir el riego de espacios verdes públicos y privados (sin incluir campos de golf) corresponde a un ahorro de 8,8 hm3 (2019)".

"Los efluentes de las 17 EDAR con alto potencial por su tamaño, proximidad a usuarios potenciales relevantes de Agua para Reutilización (ApR), con niveles de tratamiento adecuados incrementan la oferta de 20hm3, pero según otros, puede llegar a 40hm3. Además, los efluentes de las EDAR liberados en los medios naturales contaminan los ríos, las aguas subterráneas e incluso las playas, como es el caso de la EDAR de Vilamoura", se puede leer en el comunicado.

Estos valores demuestran "la irrelevancia de la inversión en la Desalinizadora de 54M€, según el PRR, que en la práctica, considerando costes adicionales como el secuestro para ETA y otros, alcanzará otros 20 o 30M€, para producir 16 hm3, previstos en el proyecto, aunque en un debate promovido por PAS, se afirmó por participantes de APA y AdA que la producción sería sólo de 8 hm3".

"La desalación ha convertido el Golfo de Omán en un desierto marino. Andalucía, a pesar del uso de la desalación, se está convirtiendo en un desierto, como consecuencia de la falta de agua provocada por una política agrícola insostenible", recuerda.

La captación de agua en la zona del Parque Natural Marino de Pedra do Valado, que constituye "una de las áreas más ricas en biodiversidad a nivel nacional y el mayor arrecife costero del Algarve, con valores naturales únicos en el contexto del litoral portugués". En particular, la zona conocida como Rocha Baixinha, frente a la playa del mismo nombre o también conocida como "playa del tomate", es una zona de pesca en la que la captación de agua y el vertido de salmuera afectarán al plancton y a la piscicultura, además de introducir limitaciones a la pesca".

La Plataforma "Mais Algarve" considera que "la playa de Falésia es una zona turística muy apreciada que sirve a toda una serie de hoteles y se verá muy afectada por las obras de instalación de conductos de abastecimiento y provocará inestabilidad en el acantilado".

La zona en la que se ubicarán las estructuras de la desalinizadora, Várzea de Quarteira, cuenta con algunos de los mejores suelos del Algarve y del país, por lo que forma parte de la Red Agraria Nacional - RAN".