"Las llamadas no paran. Desde el sábado es un pandemónium, en el buen sentido", dijo el fundador de Quinta do Pomar, Joaquim Duarte Alves, que este año pasó a estar "en segundo plano" y cedió el liderazgo del negocio a su hijo, Nuno, de 48 años, y a su nuera, Sonia.

Según Joaquim Alves, de 73 años, el premio ya refleja la demanda.

El lote de queso premiado se agotó inmediatamente y los pedidos fueron tantos que el fundador teme que no haya leche suficiente para satisfacer los pedidos en Navidad.

"Estamos recibiendo peticiones de gente que quiere exportar a Estados Unidos, a Francia, a varios países, y el queso no se puede hacer de la noche a la mañana. La curación tarda 45 días", destaca Joaquim Alves.

El queso mantecoso de oveja de Queijaria Quinta do Pomar fue considerado el mejor del mundo en los 'World Cheese Awards 2024', entre 4.786 quesos evaluados de 47 países.

El fundador de la empresa, que aprendió de su padre y enseñó el oficio a su hijo, explicó que se trata de "un queso mantecoso tipo sierra, elaborado con leche cruda de oveja, cuajado con flores de cardo", que se vende por unos 13 euros.

Joaquim Alves destacó que lo más importante en la elaboración del queso es la materia prima, que tenga buena leche, comprada a productores de la Serra da Gardunha, "en un radio de 10 a 15 kilómetros".

Después, hay que saber limpiar el cardo, tener cuidado con la condimentación y no añadir cardo ni demasiada sal, destacó.

A esto le siguen entre 40 y 45 días de curación en estanterías en un cuarto oscuro, las dos primeras semanas a una temperatura más baja y luego más alta.

Joaquim Alves es hijo de un quesero de Soalheira, pueblo donde la Cámara de Fundão promueve todos los años la Feria del Queso.

Fundó la empresa con su mujer, Maria José, en 1983, primero en la tienda de su casa. Más tarde amplió las instalaciones en un terreno detrás de la residencia y, en 2015, se trasladó a una nueva unidad, en el Parque Industrial de Soalheira, en el municipio de Fundão, distrito de Castelo Branco, donde hay capacidad para duplicar la producción actual.

Con una facturación anual de un millón de euros, la quesería cuenta con 12 empleados y produce diariamente entre 400 y 500 quesos, de los cuales entre 150 y 200 son de oveja mantecosa.

Joaquim Alves destacó que el producto premiado, que ya ha ganado tres medallas en concursos internacionales, no es el queso más vendido, sino el tradicional de la zona, elaborado a partir de una mezcla de oveja y cabra.

El fundador de la empresa no imaginaba que, la primera vez que optaban al equivalente del sector al Oscar, saldrían con la máxima distinción y consideró el galardón "un orgullo", fruto del trabajo que supone mejorar lo que se hace.

"Este premio no es sólo nuestro. Es de Soalheira, de Fundão, de los productores de leche de la región y de Portugal", dijo a Lusa el empresario, que ha sido contactado por conocidos que vieron la noticia del premio en medios de comunicación del extranjero.