"El proceso de concesión de licencias es una tortura -y es una tortura en España y Portugal-, tenemos proyectos que están parados por el proceso de concesión de licencias, o porque estamos esperando el punto de conexión, o a que el Ayuntamiento [Municipal] emita un documento", lamentó Guillermo Soler, en una entrevista concedida a la agencia de noticias Lusa.
El funcionario señaló que el proceso administrativo para la instalación de puntos de recarga de vehículos eléctricos lleva más tiempo que la propia instalación de los equipos.
Sin embargo, señaló que, desde que se han instalado las estaciones, el sistema de movilidad eléctrica está más desarrollado que en España, destacando también la ventaja de la red Mobi.E, que aglutina la mayoría de las estaciones de recarga disponibles para uso público en todo el país.
La semana pasada, el presidente de la Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos(UVE), Pedro Faria, abogó por reforzar la red de recarga de vehículos eléctricos durante una jornada promovida por la Entidad Nacional del Sector de la Energía (ENSE), en Lisboa.
Pedro Faria denunció casos en los que un punto de recarga está listo para funcionar, pero tarda casi dos años en obtener la potencia necesaria. "Actualmente, tenemos una situación inaceptable en las autopistas, nadie va a pasarse a la movilidad eléctrica si ve cinco coches haciendo cola para cargar en la estación de servicio, nos enfrentamos a enormes dificultades", advirtió.
Sobre este tema, la asociación cree que se debería revisar la ley para agilizar la instalación y puesta en marcha de las estaciones, y puso el ejemplo de Francia, donde se separó la concesión de las estaciones de servicio de la de las estaciones de recarga eléctrica.