¿QUÉ ES?
Citroën es conocida por hacer las cosas un poco diferentes, y su C5 Aircross fue un buen ejemplo de ello. Llegado en 2018 como el SUV más grande de la firma francesa -aunque sin alcanzar el mismo nivel de popularidad que rivales como el Nissan Qashqai-, ha demostrado ser un éxito, con más de 260.000 unidades vendidas.
Citroën vuelve ahora con una renovación de mitad de vida, para asegurarse de que puede seguir siendo competitivo junto a modelos más nuevos como el Qashqai y el Ford Kuga. Pero, ¿es capaz el C5 Aircross de competir en esta dura categoría?
¿QUÉ HAY DE NUEVO?
La mayor parte de los cambios de esta actualización se centran en el interior del C5 Aircross, el punto débil del modelo hasta ahora. Citroën ha trabajado para mejorar la calidad con una consola central modernizada, una nueva pantalla táctil y un mayor énfasis en el confort, un área en la que este crossover ya impresionaba.
En el exterior, el Aircross incorpora nuevos faros, varias opciones de colores y llantas, así como el logotipo de Citroën, que destaca en la parrilla rediseñada.
¿QUÉ HAY BAJO EL CAPÓ?
Nada ha cambiado en lo que se refiere a las motorizaciones del C5 Aircross. Para los que quieran algo electrificado, hay un híbrido enchufable de 222 CV que puede recorrer 38 millas con energía eléctrica hasta una carga, mientras que un 1.5 litros de 128 CV abastece a los usuarios de alto kilometraje, ya que este combustible se está convirtiendo en una rareza en esta clase.
Pero nuestro coche de pruebas utiliza el gasolina básico, un gasolina turboalimentado de 1,2 litros que genera 129 CV y 230 Nm de par. La tracción se realiza a las ruedas delanteras (como en todos los nuevos C5 Aircross), con una caja de cambios automática de ocho velocidades, aunque también está disponible una manual.
Para alcanzar los 100 km/h se necesitan poco más de 10 segundos, y Citroën anuncia un consumo de 46,7 mpg y unas emisiones de CO2 de 148 g/km. Sin embargo, en conducción real, el consumo se sitúa en torno a los 40 mpg.
¿CÓMO SE CONDUCE?
Si vienes al C5 Aircross en busca de algo deportivo, estás ladrando al árbol equivocado, ya que este es un modelo que se centra en la comodidad y la facilidad de uso diario. La ligera dirección inspira poca confianza en las carreteras secundarias reviradas, pero en la ciudad es muy fácil maniobrar, gracias a su fantástica visibilidad. El Aircross sigue siendo una opción cómoda, aunque de conducción suave, aunque puede ser un poco inquieto por los baches. No hemos conducido la nueva versión híbrida, pero sospechamos que, al igual que su predecesor, será la opción más cómoda gracias a su suspensión renovada.
Sin embargo, el motor de gasolina de 1,2 litros no le hace ningún favor. Esta unidad está más que bien en los modelos más pequeños de Citroën, pero se siente poco potente en algo tan grande como el C5 Aircross, especialmente si llevas el coche lleno de equipaje. Tampoco ayuda una caja de cambios un poco vacilante.
¿CÓMO SE VE?
Los diseñadores de Citroën no tienen miedo de ser más atrevidos que otras marcas, y el resultado es un crossover de aspecto divertido que es capaz de destacar. Al igual que antes, cuenta con los famosos "Airbumps" de la marca en las puertas -el embellecedor de plástico pegado a media altura que también puede ayudar a evitar los golpes en las puertas-, así como varios paquetes de colores para añadir algo más de brillo.
Los cambios visuales, aunque no tan significativos, son bienvenidos, con la nueva firma de iluminación LED que se ejecuta en la parrilla siendo un toque particularmente elegante. No encontrarás llantas de menos de 18 pulgadas, mientras que el abundante revestimiento de plástico ayuda a dar al C5 Aircross un aspecto robusto y resistente que gustará a los clientes.
¿CÓMO ES POR DENTRO?
El interior da la sensación de ser el más avanzado, con una consola central mucho más moderna. En los modelos automáticos, hay un pequeño selector de marchas que ayuda a liberar espacio, y la calidad en general es buena. No es premium, pero se siente sólido y duradero, con nuestro coche de pruebas con unos agradables asientos de media Alcántara, que utilizan el programa "Advanced Comfort" de Citroën, y ahora tienen más apoyo que nunca. Son ideales para aliviar el dolor de espalda en los viajes largos.
El C5 Aircross también funciona perfectamente como coche familiar. Hay mucho espacio en los asientos traseros, cada uno de los cuales se pliega y desliza individualmente. Incluso con los asientos en posición vertical, el maletero mide unos fantásticos 580 litros, eclipsando fácilmente el espacio que ofrece un Qashqai.
¿QUÉ ESPECIFICACIONES TIENE?
Todos los modelos C5 Aircross cuentan con una larga lista de equipamiento. El modelo básico Sense Plus incluye la nueva y muy mejorada pantalla táctil de 10 pulgadas de la marca, un cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas, sensores de aparcamiento delanteros y traseros y una cámara de marcha atrás.
El acabado Shine de gama media incorpora los asientos de Alcántara parcial, así como el control de crucero adaptativo (no en los modelos manuales) y el control de ángulo muerto, mientras que el acabado C-Series Edition incluye llantas de aleación de 19 pulgadas, techo solar panorámico y asientos de cuero.
VEREDICTO
El C5 Aircross ya era un SUV simpático, y estas actualizaciones no han hecho más que mejorarlo. Sigue ofreciendo un diseño atractivo, mucho equipamiento y mucho espacio interior, pero ahora tiene un interior más elegante.
Este Citroën no desafiará a los mejores de esta clase por los máximos honores, pero sin embargo, es una opción atractiva y que merece ser considerada si estás en el mercado de un crossover de tamaño medio.
RESUMEN DE DATOS
Modelo: Citroën C5 Aircross
Modelo probado: Citroen C5 Aircross Shine PureTech 130 EAT8 automático
Motor: gasolina turboalimentado de 1,2 litros
Potencia: 129 CV
Par motor: 230 Nm
0 a 100 km/h: 10,1 segundos
Velocidad máxima: 117 mph
Economía: 46.7mpg
Emisiones de CO2 148 g/km